
Una tormentosa mañana del mes de Mayo,
Jean-Pierre Boiselle, alcalde de
Saint-Pandelon, observó con mirada atónita el gris cielo que cubría el pueblo y declaró: "
Está lloviendo mierda". Ésta misteriosa "
lluvia" de excrementos realmente desvela no solo a los habitantes de este pueblito en el suroeste de
Francia, sino también a laboratorios y universidades que, a pesar del tiempo transcurrido, no pueden dar una solución a los habitantes que ven caer excrementos del cielo.
La
BBC tituló "
El día que cayó mierda del cielo" para contar la insólita historia que sucede desde mediados de Mayo, en la localidad francesa de
Saint-Pandelon, donde sus habitantes se quejan del particular fenómeno climático que hace caer del cielo "
gotas" marrones con olor y textura similar a materia fecal.
Ubicada en la región de
Aquitania, en
Francia, para llegar a
Saint-Pandelon hay que ir a
Burdeos y viajar a
Dax, cambiando trenes en
Morcex, y de ahí en autobús por
Angoumé,
Bénesse-Lès-Dax,
Candresse,
Gourbera,
Herm,
Heugas,
Mées,
Rivière Saas-et-Gourby, hasta el pueblo célebre por sus lodos milagrosos y aguas curativas, al pie del río
Adour, en los
Pirineos, no muy lejos de
Bayona.
Si al principio la historia hacía sonreír a los
750 habitantes de la localidad, éstos comenzaron a asustarse de la lluvia de excrementos, que dejó partes de la ciudad con el aire irrespirable.
"
Los niños ya no pueden jugar fuera de sus casas" aseguran los residentes, quienes se muestran reacios a comer frutas y verduras, de las huertas locales, además de que han comenzado a abandonar la práctica de realizar asados al aire libre durante el actual verano europeo.
TeoríasLa primera hipótesis planteada por los residentes, para explicar el fenómeno de las gotas "
marrones", casi del tamaño de una uña meñique, que ensucian coches, muebles de jardín y la ropa colgada en tendederos, fue que los aviones estarían descargando el contenido de sus baños sobre esa región.
Sin embargo, según afirmó la
Dirección General de Aviación Civil de Francia, eso sería imposible ya que, según sus dichos, "
los aviones de pasajeros están presurizados y no pueden descargar los contenidos de sus baños, ni cualquier otra cosa, debido a esto".
Entre las hipótesis que se tejieron surgieron las de que podría tratarse de excremento de abejas que no digerían el polen, o, quizás según propusieron otros, que fuese agua empozada y podrida de algún bosque cercano. Sin embargo la hipótesis del agua mefítica se descartó ante la presencia real de los excrementos en el suelo
La policía francesa culpó a las parvadas de vencejos, aves migratorias, que vuelan por la zona, aunque su teoría no explica por qué no llueve caca sobre
Cabo Verde,
El Cabo,
Madagascar,
Socotora,
Namibia,
Camerún y otros lugares donde abundan estas aves.
"
Ésta ave tiene la particularidad de volar todo el tiempo y comer durante el vuelo. Así que las heces caen durante el día y la noche", dijo
Michel Bretes, capitán de la policía militar de
Dax.
ExámenesUn laboratorio de la región realizó la investigación científica con el material recolectado y confirmó que las
"gotas" que cayeron del cielo son excrementos de origen animal, pero continua sin resolver el misterio.
"
En las muestras analizadas, no se encontraron bacterias específicas de las heces humanas. Pero no podemos asegurar a cual tipo de animal esos excrementos corresponden. Sólo podemos confirmar la presencia de bacterias típicas de todas las especies animales", afirmó
Alain Mesplède, director del laboratorio de análisis científico de la región.
Sin saber a ciencia cierta cual es el motivo real de ésta desagradable lluvia, y parafraseando a la creación de
René Goscinny y
Albert Uderzo, los habitantes de
Saint-Pandelon esperan deseosos que la hedionda "
lluvia" no vuelva a caer sobre sus cabezas.
¡Por Tutatis!